lunes, 25 de enero de 2010

¡ELLAS TAMBIÉN PAGAN!

Hace ya un tiempo vi un documental del programa “Documentos TV”, presentado por el gran Pedro Erquicia.
En el documental (que ya pillé empezado), había un grupo de mujeres charlando alrededor de una mesa. Una de ellas lanzó una pregunta al aire: “¿qué haremos cuando ya no nos miren?”. Respondió al instante otra mujer, y con una convicción y sencillez aplastante: “pagaremos”.
En esta pregunta y esta respuesta se resume básicamente todo el documental que siguió a continuación.
He de decir que el grupo de mujeres que se encontraban charlando estaba ya en sus cuarenta, aunque también había alguna chica más joven.

El tema que quiero poner sobre la mesa es que no sólo son los hombres los que acuden a la prostitución para obtener sexo. Si que es bien cierto que las mujeres, aunque finalmente lo que busquen es sexo, quieren un “servicio” algo diferente que el que buscan los hombres. En general lo que buscan ellas es, más que el sexo en sí, todo el ritual del cortejo y de la seducción que lleva aparejado.
Buscan una persona atractiva, educada, que les vaya a recoger a casa, que las lleve a cenar a un local elegante y que las seduzca con una conversación interesante tomando la primera copa….y, tras todo esto, no nos engañemos, volver a casa y tener una noche de sexo inolvidable.
Evidentemente todo esto cuesta un dinero, y estamos hablando de una cantidad bastante más elevada de la minuta normal que cualquier prostituta cobra a un hombre por el típico “aquí te pillo aquí te mato”.

En el documental entrevistaban a prostitutos españoles. Todos ellos cobraban una cantidad de dinero considerable por una noche (no recuerdo ahora mismo la cantidad exacta, pero creo que lo mínimo eran 600Euros). Podría decirse por tanto que los putos más miserables serían comparables a las putas de lujo. Esto a mi modo de ver es algo perfectamente entendible, teniendo en cuenta los servicios que presta uno de estos putos y los servicios que presta una “profesional” normal y corriente.

Además de lo ya comentado tenemos por otro lado el tema de la edad. En la sociedad en la que vivimos, basada en la apariencia, la estética y el materialismo, la juventud es un valor muy en alza. Lo joven es bello y lo joven se paga. No hace falta que comente la cantidad de operaciones de cirugía estética que se hacen en nuestro país para mejorar el físico y rejuvenecerlo.
No obstante a todo esto, y pese a quien le pese, y a riesgo de tener críticas feroces (aunque dado las personas que me leen tampoco creo que sean tantas, afortunadamente), tengo clarísimo, que los hombres envejecen, por norma general, bastante mejor que las mujeres. Y con esto quiero decir, que mantienen su atractivo sexual bastante más tiempo que las mujeres. ¿Ejemplos?, infinitos, Sean Connery, Harrison Ford, Richard Gere, George Clooney… y tantos otros que ya están en sus 40, 50 y 60 (Harrison Ford creo que está cerca de los 70), y que aún caen en gracia a las mujeres. Y es que como dijo un gran diseñador, “la arruga es bella”, pero más para los hombres que para las mujeres (añado yo).
Con todo esto lo que quiero decir es que una mujer soltera (o no), ya entrada en sus cuarenta y que le apetezca algo de “fiesta”, no es raro que en ocasiones tenga que acudir a esta clase de servicios.
Aprovecho aquí para comentar que yo no tengo nada en contra, ni nada que reprochar a las personas (hombres y mujeres) que pagan por sexo. Lo considero un servicio público, y cada cual acude a el por un sinfín de razones. Al fin y al cabo es una mera transacción económica en la que pagas un dinero por un servicio.

Lo que me gustaría resaltar o “criticar” o poner sobre la mesa con este modesto blog es que siempre que hablamos de prostitución se piensa en un hombre que paga a una mujer. Por supuesto que es lo más usual, pero también existe el caso inverso. Lo que ocurre con la prostitución masculina y con las mujeres que pagan por sexo, es que es un mundo mucho más oculto, mucho más silencioso y, habría que añadir, silenciado.
Está claro que este mundo existe y seguirá existiendo, porque al fin y al cabo, si existe una demanda existirá también una oferta.

Espero no haber ofendido a nadie con este tema, pero es algo de lo que me apetecía escribir desde que vi ese documental.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que te equivocas al decir que los hombres maduritos resultan interesantes para las mujeres, y no el caso contrario. Todos conocemos mujeres entradas en años que resultan muy atractivas para los hombres. Las arrugas pueden favorecer a cualquiera de los sexos.

frontier man dijo...

La verdad es que tienes razón, en ambos sexos hay excepciones de gente madura que sigue resultando muy atractiva. No obstante y lo pongo entre mayusculas EN GENERAL sigo pensando que envejecen mejor los hombres. En fin, es sólo mi opinión y por supuesto la gente puede estar en desacuerdo.