jueves, 13 de agosto de 2009

LOS MONUMENTOS POLACOS

Como ya sabreis, los apasionados lectores de mi blog, (¿5?), a finales de Julio estuve de turismo por Polonia.

Sinceramente tengo que decir, que me sorprendió con gran agrado el aire moderno, limpio y cosmopólita de su capital, Varsovia, así como de Krakovia. Ambas ciudades tienen un casco antiguo encantador, con edificios bajos pintados con tonos pastel, calles empedradas y una gran vida donde quiera que vayas.
El buen tiempo, las terracitas y las cervecitas hicieron que la visita a Polonia fuera realmente agradable. No obstante, además de todo esto, no puedo no hacer referencia a la gran cantidad de monumentos existentes en estas dos bellas ciudades, e imagino que en toda Polonia.

Los monumentos, en Polonia, están por todas partes. No son de madera, ni de piedra, ni de marmol. Tienen nombre de mujer, rasgos eslavos, ojos claros, pelo rubio platino (o en ocasiones negro como el azabache), y quizas unas medidas de 105-90-85 (lastima que no pude coger ninguna medida).
Y es que, SÍ, no sé porqué, pero las mujeres polacas son de una belleza espectacular. Quizás habría que hacer algún estudio científico para saber cuál es la razón. Una teoría puede ser por la cerveza que beben, aunque habría, como digo, que realizar un estudio empirico sobre el tema.

En fín, no dejeis de ir a Polonia y de asombraros con sus monumentos. Además está visión no exige duras caminatas, basta con sentarse en una terraza, pedirse un par de cervezas y ver "la vida pasar".

domingo, 2 de agosto de 2009

VISITA A POLONIA

El pasado mes de Julio, concretamente del 20 al 26, viajé en compañía de dos amigos (Nahuel y Alejandro), al "exótico" país de Polonia.

El viaje comenzó en coche, ya que tuvimos que trasladarnos desde el trabajo y tras un duro turno de tarde, hasta Madrid.
De camino a Madrid paramos en Miranda de Ebro a recoger al tercer integrante de la expedición, Alejandro. Llegamos a Madrid alrededor de las cuatro y media de la mañana, y tuvimos que esperar un par de horas a que saliera nuestro avión ( compañía Lufthansa) con destino a Varsovia.

Finalmente, y tras una breve escala en Munich llegamos al aeropuerto "Chopin" de la capital Polaca.
Una vez recogidos los equipajes nos abordó un taxista "pirata" que se ofreció a llevarnos a nuestro Hotel (hotel Aramis) por 70 Sloty. Por 1 Euro al cambio, consigues unos 4,25 Sloty, así que echale cuentas.
Ese mismo día salimos del hotel y sin haber dormido nada la noche anterior, nos dispusimos a recorrer brevemente la Old town de Varsovia. En seguida comprobamos que la parte vieja de la ciudad era de una belleza cautivadora, a pesar de que fue completamente reconstruida tras los bombardeos alemanes de la Segunda guerra mundial. Al mismo tiempo, y tras la comida y varias cervezas también nos dimos cuenta de que la vida allí, si vas con Euros, es bastante barata. Comida, cerveza, taxis, autobus, discotecas... todo resulta mucho más barato (que en España, al menos). Regresamos al hotel ya por la noche y los tres gozamos de un merecido sueño reparador.

Al día siguiente y tras levantarnos bastante tarde (había que cargar pilas para la que se avecinaba), nos dirigimos nuevamente al centro. Estuvimos todo el día pateando la ciudad (y sus terrazas, claro está), regresamos al hotel. Botellón en la habitación y a descubrir Varsovia "la nuit ". Nos metimos en el Anklawa, tras una primera copa en un bar, y allí descubrimos el fiestón que puede haber en Varsovia un Martes por la noche. Estuvimos todo el rato en el club, y ya al amanecer, y con una considerable melopea, regresamos en taxi al hotel. La baticueva nos esperaba.

El Miércoles nuevamente estuvimos por la ciudad vieja. Por la tarde-noche quedamos con Hana, una chica que había conocido Alejandro en el Anklawa. Tuvimos una agradable conversación y regresamos nuevamente al hotel. Al día siguiente nos esperaba Krakovia y Auswitch.

Nos levantamos muy pronto, seis de la mañana. Taxi a la estación de trenes y cogimos el de las 7.15 a Krakovia (unas tres horas de viaje). Durante el trayecto y graciás a la guía trotamundos, me documenté sobre la geografía, historia y tradiciones de Polonia.
Una vez en Krakovia cogimos directamente un minibus que te llevaba directamente a la entrada de Auswitch. 9 Sloty por cabeza. Aquel fue el día más caluroso que pasamos en Polonia (36 grados). El calor, unido al sol y a los cientos de personas (turistas), que abarrotaban el antiguo campo de concentración, hicieron que la visita desmereciera bastante.
En Auswitch se ejecutaron entre millón y medio a dos millones de personas. No obstante y pese a todos los carteles de "guardar silencio", "prohibido fotos", etc, no pude evitar tener la sensación de estar en una especie de parque temático. Quizás esperaba otra cosa de tan fatídico lugar.
Tras Auswitch cogimos nuevamente el minibus a Krakovia y pasamos allí toda la tarde. Visitamos las zonas más turísticas, colina de Babel, plaza de la Lonja,... y a las ocho de la tarde nuevamente al tren.
En una cabina privada (de 6 plazas pero en la que estábamos unicamente los tres), organizamos una pequeña fiesta privada a base de Vodka finlandes. Llegamos a Varsovia con un punto bastante majo ya. Hotel, ducha, más alcohol en la baticueva, y nuevamente de fiesta. Primero Anklawa y finalmente acabamos en el "Lemon", un lugar de música latina, donde conocimos a "los colombianos", un grupo de amiguetes, con los que hicimos muy buenas migas. Acabamos con ellos hasta tarde, y volvimos al hotel.

El Viernes, más de lo mismo. Paseos por Varsovia y por la noche salida nocturna. Esta vez no pudimos ir al Anklawa ya que había una fiesta privada. Fuimos en primer lugar al Zoo, donde nuestro amigo Alejandro conquistó a una bella señorita y, por causas de fuerza mayor, nos dejó solos a Nahuel y a mi.
Tras terminar todo el Vodka que habíamos colado de "estranjis" en el club, vagabundeamos buscando el "Lemon", unos simpáticos viandantes nos acercaron hasta el lugar, aunque viendo nuestro estado, no se atrevieron a entrar con nosotros. Allí en seguida nos encontramos con los colombianos y la fiesta continuó. Llegamos a casa ya con la luz del día (aunque en Polonia en verano amanece sobre las cuatro de la mañana).

El Sabado se repitió la misma historia que el Viernes, con la excepción de que yo "me caí del banquillo". Demasiada juerga para un anciano. Así que me quedé durmiendo en el hotel, esperando que llegará el día siguiente y la vuelta a Tierra Santa.
Pesé a eso, no descansé demasiado. Una visita (acompañado) de Alejandro sobre las dos de la mañana, la luz del sol y la llegada de Nahuel, tajado, alrededor de las seis y media, me lo impidieron totalmente.

Finalmente llegó el Domingo, aeropuertos, vuelos y la llegada a Madrid-Barajas sobre las doce de la noche.

La puntilla final la puso conducir hasta Pamplona desde Madrid. Llegamos a Pamplona sobre las cinco y media de la noche.
Al día siguiente (tenía turno de noche), pagué caro todo el trajín del viaje.

NOTA SOBRE ALGUNOS PRECIOS.
-Un billete de autobus urbano-----------------------------------2,80 Sloty
-Una comida/cena en restaurante medio (sin postre)--------------Unos 10 Euros
-Una pinta de Tiskie o Siwiech----------------------------------Desde 7 Sloty (e incluso menos)
-Una entrada a un club/discoteca--------------------------------10 Sloty
-Un trayecto diurno en taxi (zona urbana)-----------------------25 Sloty
-Un billete de tren Varsovia-Krakovia---------------------------100 Sloty
-Un café--------------------------------------------------------8 Sloty